El Ministerio de Cultura y Deportes saluda a los artistas en su día

Desde la prehistoria, el ser humano descubrió que podía usar elementos de su entorno, y hasta su cuerpo mismo, para expresar lo que pensaba, y también lo que estaba más allá de las palabras: sus sentimientos.
Ya fuera moviendo su cuerpo en danzas primitivas, golpeando rítmicamente piedras y troncos, modulando su voz en sonidos que imitaban a las aves, y luego, al desarrollar las primeras palabras, contando historias alrededor de las hogueras que los protegían del frío y de las bestias, y plasmando lo que veían en dibujos rústicos en las paredes de las cuevas, nuestros ancestros empezaron a crear algo que trascendía más allá de la vida: el arte.
Con el correr de las épocas, la creatividad artística ha servido para expresar, en todas sus manifestaciones, el afán de belleza, de trascendencia y de sentido; una de las características de la naturaleza humana.

Disciplinas para enriquecer el espíritu
Pintura, escultura, música, danza, narración oral y escrita, son los vehículos que han servido a incontables personas del mundo entero, para hacerse oír y crear nuevos mundos, que nacen dentro de su ser. Todo ello sirve no sólo para que los autores de las obras artísticas puedan expresarse, sino para que el público que las contempla encuentre inspiración, alegría y nuevas ideas.
Puede decirse, sin duda, que el arte es una de las manifestaciones más trascendentales del quehacer humano, sobreviviendo a la caída de reinos, imperios y naciones.
Desde 2012, la Asociación Internacional de Artes Plásticas (AIAP), la mayor organización de artes visuales del mundo y miembro de la Unesco, consideró que una expresión humana tan significativa merecía su propio día de celebración. Para ello, establecieron el 15 de abril como la fecha ideal, en honor al natalicio de uno de los más grandes genios de la historia, cuya brillantez abarcó tanto las ciencias como las artes: Leonardo da Vinci.

Genio y figura…
Leonardo da Vinci, un genio indiscutible en disciplinas tan diversas como el dibujo, la pintura, la escultura y la arquitectura, además de su faceta como botánico y naturalista, es considerado el modelo perfecto del “hombre del Renacimiento”: alguien capaz de dominar una amplia variedad de artes, ciencias y conocimientos.
El apelativo es más que acertado, pues Da Vinci nació en 1452, cerca de la pequeña ciudad italiana que lleva su nombre, apenas un año antes de un acontecimiento histórico que marcaría el fin de la Edad Media y el inicio del Renacimiento: la caída de Constantinopla ante el Imperio Otomano.
En ese contexto extraordinario, Leonardo llegó a encarnar el espíritu de toda una era, y en honor a su fecha de nacimiento, el mundo entero celebra hoy el arte. Esta fecha conmemorativa fue declarada de manera oficial por la Organización de Naciones Unidas en el año 2019.
En Guatemala, el arte es una presencia viva y milenaria. Desde los murales de Bonampak hasta los lienzos del maestro Elmar Rojas. Desde los mitos creacionales del Popol Vuh hasta las narraciones de realismo mágico de Miguel Ángel Asturias. Desde los sobrios y ceremoniales movimientos de la danza-drama Rabinal Achí hasta los audaces y estilizados giros de los bailarines del Ballet Moderno y Folklórico de Guatemala y el Ballet Nacional “Christa Mertins”, todo ello enlazado con el hilo de hormigo de las teclas de la marimba, nuestro instrumento nacional, así como los distintos espacios de formación artística de las distintas disciplinas.
Es por ello que el Ministerio de Cultura y Deportes, con orgullo, trabaja sin descanso para abrazar, apoyar y estimular todas las manifestaciones del arte que hacen de Guatemala un gran país, y saluda con cariño y orgullo a todos los artistas, docentes, estudiantes y practicantes de estas disciplinas, en su día.






