Talleres y espectáculos escénicos se brindan en centros de detención de menores
El cumplimiento de condenas de privación de libertad al cometerse un delito no tiene sólo el objetivo de separar al ofensor de la comunidad. Un componente muy importante de este proceso es la rehabilitación del infractor y su redención para poder reintegrarse funcional y sanamente al tejido social.
Lo anterior es aún más importante cuando los infractores son jóvenes que han cometido delitos influenciados por entornos peligrosos y con pocos servicios. En esos casos se hace aún más urgente brindarles a los jóvenes que han caído en conflicto con la ley herramientas para poder enderezar su camino y buscarse un futuro mejor.
Por todo lo anterior, el Ministerio de Cultura y Deportes, a través de su Departamento de Apoyo a la Creación Artística, CREA, contribuye en esta vital fase de la rehabilitación de jóvenes en conflicto con la ley, para beneficio de la sociedad en su conjunto, brindándoles a los jóvenes talleres de expresión artística y espectáculos teatrales.
Las actividades se realizaron en el Centro Juvenil de Detención Provisional (CEJUDEP) y en los centros conocidos como Las Gaviotas y Los Gorriones. Los jóvenes privados de libertad recibieron talleres por las mañanas y, por las tardes, presenciaron espectáculos durante los cinco días que duró la actividad.
El teatro como herramienta de cambio y sensibilización
Los talleres fueron impartidos en todos los centros de detención por el actor Rubén Ávila, con una larga trayectoria en trabajo comunitario a través del llamado teatro del oprimido, técnica desarrollada por el dramaturgo brasileño Augusto Boal para resolver problemas sociales y comunitarios a través del teatro.
Por su parte, los espectáculos estuvieron a cargo de Fredy Corado y del colectivo Caja Lúdica, que se especializa en la resolución de problemáticas sociales a través de la comparsa, el arte y las actividades lúdicas. El colectivo brindó presentaciones en CEJUDEP. Fredy Corado, bailarín profesional especializado en tap y en producción de espectáculos escénicos, organizó las presentaciones en Los Gorriones y en Las Gaviotas.
Al final de la experiencia, los jóvenes en conflicto con la ley montaron obras de teatro sencillas, aplicando los conocimientos aprendidos y las vivencias experimentadas. «Vimos puestas en escena basadas en las experiencias de su cotidianeidad, del por qué llegaron ahí», explica Brenda Lara-Markus, directora de CREA. «Fue algo increíble, muy emotivo», comenta Lara. «Los jóvenes expresaban en los montajes su anhelo por tener una segunda oportunidad, y tanto ellos como las autoridades presentes se sensibilizaron», añade.
«Es muy importante indicar que, para realizar estos talleres, se indagó sobre el proceso de tratamiento psicológico que los jóvenes estaban llevando en ese momento, para orientar los talleres y los procesos creativos en la misma dirección», cuenta Lara Markus.
Una experiencia que busca llegar lejos
Esta experiencia fue un programa piloto de CREA. Se espera que para el año 2025 se concrete un acuerdo ministerial que permita seguir replicando dicha actividad como un programa permanente, ampliándolo a más centros de detención y realizando talleres con una duración mínima de tres meses.
En el futuro cercano también se prevé impartir talleres y espectáculos en los centros de resguardo de menores víctimas de violencia «Tejiendo Sueños», «Trata de personas guatemaltecas» y «Zafiro 1, 2 y 3».
Los talleres serán impartidos por la artista escénica Emy Coyoy, como retribución al pueblo de Guatemala, al haber sido beneficiada recientemente con un boleto a España para presentar una investigación de un método de actuación. De esta manera, el apoyo a los artistas de Guatemala es devuelto a la sociedad en actividades que la enriquecen y fortalecen.
Los menores de edad en situaciones de vulnerabilidad, violencia y conflicto con la ley merecen la oportunidad de una vida mejor, y el Ministerio de Cultura, a través de CREA, pone su grano de arena en esta lucha que es de todos y para todos.
